Tala
Celtis ehrenbergiana (Klotzsch) Liebm. var.
ehrenbergiana
Sinónimo
científico: Celtis tala Gillies ex Planch. ; Celtis spinosa var. weddelliana
Familia: Celtidaceae
Otros
nombres: juasy’y, yuasí i
guasú, yoasí í guazú, que en
guaraní significa “yu: aguja,
aguijón, espina”; “guazú: grande”.
Celtis
(látigo), por el uso que se hacía
de las ramas, y tala,
nombre local de la planta.
Arbusto
o arbolito espinoso de porte mediano a bajo.
Tronco
por lo general tortuoso, corteza de poco espesor, algo agrietada y escamosa,
pardo grisácea en ejemplares jóvenes y con tendencia a desprenderse en
ejemplares maduros.
Follaje
que desarrolla una copa globosa y muy ramificada. Hojas verde brillantes,
simples, caducas, alternas, que en general presentan los bordes aserrados solo
en la mitad inferior.
Es
característica la disposición en zig-zag de sus ramas, con espinas dispuestas
de a pares en los nudos. Frutos en forma de drupa ovoide, poco carnosos,
constituyen un alimento muy buscado por las aves.
Flores
pequeñas que prácticamente pasan inadvertidas, no así sus numerosos frutos que
destacan por su intenso color anaranjado, que en verano le dan un aspecto muy
decorativo. Florece en primavera y fructifica en verano y otoño.
Origen:
Sudamérica tropical y subtropical. De amplia distribución, se puede encontrar
en Brasil, Uruguay, Paraguay, Bolivia y Argentina.
